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Casa Generación Celebrates 30 years!
Next month marks the 30 year anniversary of Casa Generación, a Peruvian non-profit organization that protects and defends the human rights of children, youth, and adolescents who live in the streets of Lima, Perú.
During the late 1980's and early 90's, Perú was suffering from internal conflicts and enduring atrocities under the administration of Alberto Fujimori. Thousands of Peruvian citizens were denied their basic human rights, and children and young adults were among the most vulnerable to oppression at the hands of the state and structures that kill. During her visits to juvenile detention centers in Lima, Perú, a woman named Lucy Borja learned more about the realities of children living on the streets. She heard countless stories of kidnapping, rape, torture, and children being shot by Peruvian death squads. She decided to act.
Lucy started by making her work office in central Lima available to children who needed a place to stay at night. Upon entering her office the next morning, she found the room filled with children--even the cabinets and cupboards housed a child or two. Lucy quickly realized that this problem was much bigger than she had anticipated. She invited the children to come stay with her at her home until she could find a space for them. This first generation of children who sought refuge with Lucy became known as “Generación”. In October of 1988, Lucy Borja founded Casa Generación. And so, the story begins.
Casa Generación recognizes that children and adolescents living on the street face extreme violations of their rights and lack their basic needs. Many girls that are survivors of human trafficking and sexual exploitation are subjects to mechanisms of abuse, oppression, exploitation, and alienation.
Over the years, Lucy acquired three homes that are open to street children. Casa Generación has created spaces where abuse and oppression is no longer tolerated. Human rights, dignity, and peace are the order of the day. The voices of the children are heard. Currently, over 50 children live in a Casa Generación home where they receive meals, support, and love. Casa Generación fights for the right of education, and the children are enrolled in schools where they are respected and cared for. In addition, children partake in life-giving daily activities such as surfing, theater, music, art classes, soccer, and skateboarding. Upon entering the group homes, it’s typical to see kids passing around a soccer ball while others sit coloring at the table. During mealtimes, the children sit around long green picnic table and bow their heads, giving thanks aloud for Lucy, and the beach, and their friends at Casa Generación.
There is an overwhelming feeling of hope that fills the rooms. Lucy and the Casa Generación team reinforce the narrative that we all have inherent worthiness. The children of Casa Generación reclaim their truth about lovability, divinity, and creativity. They are taught to be the authors of their lives and given the tools to write their own bold endings. From fear, Casa Generación crafts courage. And from heartbreak, Casa Generación crafts love.
Once a year, the broader community of Casa Generación (children, families, and alumni) comes together for a celebration. Approximately 600 individuals joyously arrive at the door to partake in what looks like a massive family reunion. Thirty years later, the first generation of children who arrived at Lucy’s office in 1988 are in their 40’s, many with their own children and grandchildren. There are many that now work for Casa Generación as teachers, cooks, and mentors for the younger children. They all embrace Lucy and tell their unique story of how they met their “mom” and the way she’s changed their life forever.
A lot has changed in 30 years. Politically and socially, Perú has advanced and regressed in varying ways. However, the struggle for demanding rights for children and adolescents living in the streets continues: in the home, in the streets, and against the political figures and lawmakers who continue in their agendas for oppression. Casa Generación proudly leads the way.
Lucy once told me, “All children, from all around the world, are equal and have rights.” Casa Generación continues to dedicate themselves to improving the lives of children on the streets of Perú, and by the grace of the universe, will continue to do so for many generations to come!
“Yo creo que es una obligación de todos los Peruanos, y de todas las personas, que si vemos en circunstancias difíciles a cualquier niño, tenemos que intervenir. Yo creo que es una obligación. Desde chiquito hemos escuchado el amor al prójimo cómo a si mismo. Bueno, ese niño es el prójimo que tenemos que ayudar y amar.” - Lucy Borja
“I believe it is an obligation for Peruvians, and for all people, to intervene if we see a child in difficult circumstances. I believe it is an obligation. Since childhood, we’ve heard that we must love our neighbor as we love ourselves. Well, that child is the neighbor that we have to help and love.” - Lucy Borja
To donate to Casa Generación, click here. Happy 30th Anniversary Casa Generación!
¡Casa Generación Celebra 30 Años!
El octubre del 2018 marca el 30 aniversario de Casa Generación, una organización Peruana que protege y defiende los derechos humanos de niños, jóvenes, y adolescentes en situación de calle en Lima, Perú.
Entre los años 1980 y 90, Perú estaba sufriendo de conflictos armados internos y estaba en crisis bajo el gobierno de Alberto Fujimori. Miles de Peruanos estaban negados sus derechos humanos básicos, y los más vulnerables durante esa época eran los niños y jóvenes. Durante sus visitas a los centros de detención juvenil, una mujer que se llama Lucy Borja aprendió más sobre las realidades de los chicos en situación de calle. La contaron del secuestro, la violación sexual, la tortura, hasta la muerte de los chicos a las manos de escuadrones de la muerte. Ella decidió actuar.
Comenzó por ofrecer su oficina en Lima donde trabajaba como un lugar donde los niños podían pasar la noche. Cuando entró su oficina la próxima mañana, encontró la oficina llena de niños—hasta los armarios funcionaron como una cama. Lucy se dio cuenta rápidamente que ese era un problema más extenso que anticipó. Ella invitó a los chicos a quedar con ella y su familia en su casa hasta que había otro lugar. Esta generación de niños que buscó refugio con Lucy se hizo conocido como la “Generación”. En october de 1988, Lucy Borja fundó Casa Generación. Así empieza la gran historia.
Casa Generación reconoce que los chicos y adolescentes viviendo en las calles han vivido violación de los derechos y faltan necesidades básicos. Muchas de las niñas quienes son sobrevivientes de la explotación sexual han sufrido el abuso, la opresión, la explotación, y el aislamiento.
A través de los años, Lucy adquirió tres casas donde viven chicos en situación de calle. Casa Generación ha creado un espacio donde el abuso y la opresión ya no está tolerado. Los derechos humanos, la dignidad, y la paz son las cosas fundamentales en las casas de la organización. Las voces de los niños están escuchados. Actualmente, más que 50 niños viven en Casa Generación donde reciben la comida, el apoyo, y el amor. Casa Generación lucha por el derecho de la educación, y coloca los chicos en colegios donde reciben respeto y cariño. Además, los chicos hacen actividades que ofrecen la libertad, como correr tabla (surf), el teatro, la música, el arte, el fútbol, y patinar. Al entrar las casas, es típico encontrar chicos jugando fútbol mientras otros estás pintando juntos. Durante las horas de comida, los chicos se sientan alrededor de una mesa larga y verde, y se inclinan sus cabezas para orar. Rezan por Lucy y dan las gracias por ella, la playa, y sus amigos de Casa Generación.
Hay un sentimiento abrumador de esperanza que llena el espacio. Lucy y todos el equipo de Casa Generación se refuerzan la narrativa que todos tenemos mérito inherente. Los niños de Casa Generación reclaman sus verdades propias sobre sus capacidades de amar, la divinidad, y la creatividad. Aprenden cómo pueden ser los autores de sus vidas, y reciben las herramientas que necesitan para escribir sus propios futuros. Del temor, Casa Generación crea el coraje. Y del desamor, Casa Generación crea de nuevo el amor.
Anualmente, la comunidad más amplia de Casa Generación (los chicos, sus familias, y los antiguos alumnos) se reúne para una celebración. Aproximadamente 600 individuos llegan alegremente a la casa para participar en lo que parece que una reunión familiar. Treinta años después, la primera generación de chicos que llegó a la oficina de Lucy en 1988 tiene más que 40 años de edad, y muchos de ellos tienen sus propios hijos y nietos. Hay muchos que trabajan por Casa Generación como profesores, cocineros, y educadores a los más jóvenes. Todos abrazan a Lucy y cuentan sus historias únicas de como conocieron a su “mamá Lucy” y como ella cambió sus vidas para siempre.
Mucha ha cambiado en 30 años. Socialmente y políticamente, Perú ha desarollado en formas positivas y en otras formas ha retrocedido. Sin embargo, la unión en la lucha por la exigencia de derechos de las niñas y los niños en situación de calle sigue: en las casas, en las plazas, en las calles y contra los magistrados que creen que pueden seguir violentando derechos. Con mucho orgullo, Casa Generación sigue adelante.
Lucy una vez me dijo que “todos los niños de todo el mundo son iguales y tienen derechos”. Casa Generación continua de dedicarle a mejorar las vidas de los chicos en situación de calle en Perú, y, ojalá, continuará por las generaciones que vienen.
“Yo creo que es una obligación de todos los Peruanos, y de todas las personas, que si vemos en circunstancias difíciles a cualquier niño, tenemos que intervenir. Yo creo que es una obligación. Desde chiquito hemos escuchado el amor al prójimo como a si mismo. Bueno, ese niño es el prójimo que tenemos que ayudar y amar.” - Lucy Borja
Para hacer una donación a Casa Generación, haga clic aquí. ¡Feliz 30 Aniversario, Casa Generación!